Este primer sábado de septiembre tuvimos el placer de disfrutar de Fustiñana. Lugar de grandes músicos y mejores amigos. Para evitar lo que había sucedido en los días anteriores, contratamos para la ocasión un clima espectacular, porque cuando te reúnes con gente de tal calibre hay que tener todo bien organizado para que esos amigos, a los que además llevas tiempo sin ver, disfruten con nuestra compañía.
Un placer como siempre volver a Fustiñana, lugar que siempre nos trae buenos recuerdos.
Esperamos vernos pronto danzando las calles, pero mientras tanto, estas noches musicales que se llevan a cabo en todas las poblaciones ponen magia a un verano tan atípico. Y nosotros nos sentimos muy afortunados de formar parte de esas noches. Por eso y más que nunca:
¡GRACIAS FUSTIÑANA!